El martes de Carnaval venimos comiendo, en nuestro local social y desde siempre, pote con berzas, picadillo con patates y frixuelos. Este menú tradicional ha venido completándose en otros sitios, con postres mas variados. Así viene siendo frecuente el incluir buñuelos, arroz con leche o casadielles, lo que no está mal porque todos son postres excelsos, muy del gusto asturiano y apropiados para culminar cualquier banquete. Pero lo importante del menú de Carnaval yo creo que es el pote. El pote es un grito de rebeldía ante la inminente opresión de la Cuaresma. Antes de que lleguen los tiempos del ascetismo, de la penitencia y de la obligada vigilia recomendada y ordenada por los responsables del rito católico , bien viene un poco de desenfreno, una fiesta carnal y carnívora que termine en resaca seria que precise, para su apropiada cura, la sanidad de pescados y vegetales. Y es ahí, con antigua resonancia pagana, donde el pote impone su presencia rebelde; la berza y el resto de vegetales – patatas, fabes, nabos- solo son adornos que protegen y guardan la excelencia de las diversas carnes del cerdo, potentes y sabrosas, que se erigen en figura cumbre y mágica del exceso. Careta de cerdo, lacón, chorizo, morcilla… curados ingredientes que nacieron con la humanitaria luz de San Martín ,brillan y hacen guiños de gula al comensal que sabe disfrutar del pecado.
«Comamos y bebamos y cantemos y holguemos , que mañana ayunaremos. Por honra de San Andruejo, parémonos hoy bien anchos, embutamos esos panchos, recalquemos el pellejo… » Así reza el villancico de égloga que Juan del Enzina compuso allá por el siglo XVI y que hoy, aquí, en otros tiempos y circunstancias, sigue encerrando la verdad de que siempre es bueno disfrutar. Y con notable empeño nos hemos esforzado hoy, en El Rinconín, en hacerlo ….aunque de postre solo tuviésemos doscientos diez frixuelos para menos de dos docenas de comensales; y encima hubo hasta quien perdió al mus sin jugar mal. Pero no todo puede ser perfecto.
Gracias a Manuel Busto por la elaboración de este excelso menú y que todos gocen y disfruten estos Carnavales.
Como siempre, queden algunas fotos para el recuerdo de esta fiesta.